Trucos para limpiar el marmol y sus manchas

El mármol es un material poroso, por lo tanto, cualquier mancha en él puede ser eliminada con facilidad, por eso es recomendable limpiarla en el acto. 

El método más común es el agua y el jabón.  Igualmente, se puede usar agua oxigenada (peróxido de hidrógeno al 3 por ciento); dejamos que actúe durante un par de horas y luego aclaramos con un paño húmedo.

Las manchas oscuras podemos tratar de quitarlas con gasolina o con aceite mineral (de venta en droguerías). También pueden utilizarse los productos limpiamuebles siempre que sean de buena calidad. 

Sin embargo, cuando las manchas son más fuertes, se pueden seguir los siguientes métodos:

Para manchas de herrumbre dejadas por las patas de metal de algún mueble, la mezcla de jugo de limón con sal es lo recomendable. Ver herrumbre.
 
Las marcas de quemaduras de cigarro, sólo se quitan si el mármol se pule nuevamente.

Muchas veces se aplica una capa de cera a la meseta o pieza de mármol para sellar un poco sus poros, pero cuando hay muchas capas de cera una sobre otra, el mármol blanco sobre todo, puede presentar una apariencia amarillenta. 

Para resolver este problema, se debe quitar toda la cera del mármol empleando para ello cualquier producto comercial, y después de limpiarlo bien con agua y jabón, volverlo a encerar si se desea.
 
Las manchas de vino se pueden quitar si las limpia con agua y bórax (3 ó 4 cucharadas de bórax en 1 pinta de agua). Se frota y luego se enjuaga bien una vez que la mancha haya salido.
 
Esta misma solución se puede emplear para la mancha de café en el mármol. El cloro líquido suavizado en agua o algún producto a base de cloro, también se puede emplear para blanquear el mármol blanco, pero recuerde, por poco tiempo. 

También los cepillos son buenos auxiliares para limpiar el mármol y si se emplean junto con algún polvo limpiador, se obtienen magníficos resultados. Si la suciedad es superficial y no sale con la esponja solamente, puede usar alambre de aluminio #0000 para frotar la mancha, pero muy suavemente para que no dañe el terminado del mármol.

No debe usarse el vinagre, ni limpiadores que contengan ácido acético, porque atacan el mármol lo mismo que eliminan las incrustaciones calcáreas.