lunes, 27 de septiembre de 2010

Trucos para que el planchado sea ligero y eficiente


Muchas veces el planchado de ropa en casa se nos hace pesado. Sin embargo, existen agunos consejos y trucos caseros que pueden hacer de esta faena tediosa en algo placentero.



Utilizar bien la tabla
Tener un buen equipo de planchado facilitará mucho este trabajo, pero eso no basta: también hay que saber "usarlo".

Unos malos hábitos posturales pueden ocasionarte molestias que se agravarán si no los cambias. Si sigues unos sencillos consejos conseguirás aligerar esta "pesada" tarea.
  • Gradúa la tabla a la altura de tu ombligo o incluso un poco por encima.
  • Manten la columna recta y sin flexionar el tronco hacia delante.
  • Apoya uno de tus pies sobre una banqueta baja y alterna una y otra pierna.
  • Acerca la tabla a una mesa, si tienes que hacer algo de fuerza para planchar. De esta forma podrás apoyar el otro brazo sobre ella.
  • Reposa cada 15 minutos. Puedes aprovechar para guardar en los armarios las prendas que estén listas.

Plancha sentada. Aunque al principio tal vez te resulte un poco extraño, cuando te acostumbres verás que es mucho más cómodo. Incluso hay algunas tablas que se comercializan con una práctica banqueta incorporada. Para no forzar los brazos y los hombros, la plancha debe quedar a la altura de tu cintura.


Comprar una plancha nueva
Si quieres comprarte una plancha nueva, las siguientes ideas te ayudarán a escoger la más adecuada:

Las llamadas de caldera son muy ligeras porque el depósito va aparte. Producen mucho vapor, reduciendo a la mitad el tiempo de planchado y ofreciendo un acabado perfecto.

Al comprarla conviene que tengas en cuenta la capacidad del depósito, la presión y la salida de vapor. Ten cuidado al introducir el agua y no lo hagas con la plancha caliente (podrías quemarte).

Es importante que uses agua destilada, ya que si utilizas la del grifo podrías estropear la plancha y a su vez manchar la ropa debido a la cantidad de cal que contiene.

Ahora también hay planchas que permiten trabajar sobre cualquier tipo de ropa sin tener que ir cambiando de temperatura.


Consejos prácticos para un buen planchado
  • Con la ropa un poco húmeda obtendrás mejores resultados.
  • Para evitar brillos, extiende sobre la prenda un paño de algodón.
  • Dale la vuelta a la ropa y plánchala al revés. Evitarás dañar el tejido.
  • Sigue las indicaciones de la etiqueta para seleccionar la temperatura que se adecúe a las características de la ropa.
  • Si es una prenda nueva, plancha primero la parte de tela que no queda a la vista.
  • Empieza planchando las costuras y las pinzas y hazlo en la dirección al tejido.
  • En las camisas, lo primero que debes planchar son los puños y las mangas.
  • Para hacer la raya de los pantalones, enfrenta las costuras, alísalas y marca las líneas de los extremos.

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